Vladimir Putin triunfó en las elecciones rusas que tuvieron lugar este domingo. Con el casi 64% de los votos, el que ahora se convierte en el presidente ruso, tendrá la legitimidad suficiente para realizar reformas económicas y políticas y no necesitará acudir a una segunda vuelta.
En el segundo lugar se sitúa el comunista Guennadi Ziugánov, que ha visto robustecida su postura, y en tercera posición estará el multimillonario Mijaíl Prójorov que, a pesar de no haber llegado al 7% de los votos, es su primera vez en una disputa presidencial y se encuentra planeando un nuevo partido de corte liberal.
La oposición no se queda en silencio ante la victoria de Putin y ya han convocado una concentración en la plaza Pushkin (Centro de Moscú). El movimiento contra el régimen está compuesto por una coalición de nacionalistas, liberales y ciertas personalidades del mundo de la cultura y de los medios de comunicación. Bajo el lema 'Rusia sin Putin', algunos se manifestaron en Moscú y otras ciudades rusas.
El discurso que pronunció el vencedor de las elecciones ayer poseía un tono poco conciliador. De hecho, se refirió a la oposición como aquellas personas que buscan la desintegración del país y no su florecimiento.
En esta nueva etapa que se abre ante él, tendrá que hacer frente a los problemas que padece Rusia, tales como la corrupción y la necesidad de realizar reformas estructurales en la economía, con motivo de reducir la dependencia de los hidrocarburos, así como también cambios en el sistema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario