El que fue uno de los integrantes de los Beatles presenta un nuevo disco a punto de cumplir 70 años en una sala de reuniones de un hotel de la capital británica
Se trata de un álbum de versiones clásicas estadounidenses, de la época en la que el ex beatle creció, tales como It´s Only a Paper moon. McCartney realiza así, un trabajo en el que deja constancia de la importancia de las influencias en los artistas musicales. "Esas canciones tan bien estructuradas compuestas por Gershwin, Harold Arlen, Cole Porter son joyitas. John Lennon y yo las conocíamos bien aunque decidiéramos ir en otra dirección. Pero si uno se fija, nuestros temas son diferentes a los del rock and roll clásico. Tienen una pequeña introducción y cambian de clave. Ahora me doy cuenta de que la influencia de la música que escuchaban nuestros padres las hace diferentes". En este trabajo, denominado Kisses on the bottom, Paul McCartney relega la parte instrumental a Diana Krall. "Diana ha sido muy importante en este disco. Es una gran artista, con un enorme conocimiento musical", afirma el cantante.
Los años pasan por él, pero no por su voz, que se mantiene en el mismo tono que hace décadas. Sin embargo, no así su estilo, menos original y un tanto básico. Sin embargo, el cantante se muestra satisfecho y reconoce orgulloso la labor que los Beatles hicieron para la música británica. "Fuimos casi los primeros. Se ha hecho tanto y tan bueno que los músicos de hoy lo tienen difícil. Hay bandas excelentes, como Coldplay y Foo Fighters. Pero nunca conseguirán ser tan buenos como los Beatles", concluye McCartney.
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